Nuestra historia

Nuestra historia:

En medio de verdosos valles y salvaguardada por los ríos más cristalinos que la acogen en su regazo templado y puro, la belleza y atractivo de Silvania no se comparan ni con el mejor de los paisajes; allí Dios se extremó en creatividad dando la mejor de las semillas del más exquisito café. Semillas que darían inicio a un sueño que trascendería generaciones, allí en las veredas de Santa Rita la Baja, se halla la historia de una pareja tras un sueño, un comienzo nuevo.

Marcolino y Soledad llegan a Silvana con la esperanza de rehacer nuevamente su vida luego de haber partido de su natal Palermo, Boyacá, cerca de sus hijos, quienes desde muy jóvenes habían salido de su pueblo Natal, uno de ellos el joven Rafael, trabajador y apasionado por el campo se prepara para el futuro alternando clases en la ciudad con trabajo arduo en la finca.

Cruzando llanuras y montes también en Palermo, Mèlida de padres santandereanos cafeteros y Gregorio extrañan a su hija, la encantadora Gladys, quien se fue a Bogotá con su espíritu y fulgor aventureros para prepararse en la Universidad y experimentar la gran ciudad.

Los años siguen su curso, y sin si quiera imaginar lo que El Creador les tenía preparado. Rafael y Gladys quienes comparten recuerdos

 

intactos de infancia, Gladys la más aplicada y Rafael aprovechando cada día al máximo, viviendo con una energía incontenible. Se reúnen y sus corazones nuevamente latían juntos en un solo palpitar con la melodía del romance hacia un horizonte prometedor.

El fruto del amor, el trabajo en el marco del sagrado vínculo de la familia, traen a la existencia 3 muestras de un amor fiel y esforzado; Carlos Andrés, Francisco Javier y Ángela Patricia se cobijan bajo el regazo del campo en una finca donde muy temprano sus progenitores construyeron las bases de un futuro que alcanzaría las siguientes generaciones.

Un proyecto que ha pasado de generación en generación enmarcado por el magnífico campo cundinamarqués y una belleza inspiradora, los abuelos y los papás y ahora los hijos aun a pesar de altibajos en la economía, épocas de violencia  e inclemencias del clima, le apuestan por el mejor producto con todas sus fuerzas; el café, un grano magno ideado en la mente del Arquitecto del Universo puesto en la finca La Primavera que no es más que un paraíso con árboles altos, frutales y una gran variedad de especies silvestres, una imagen de la primavera de Dios. Una historia que aún no se ha terminado de escribir…

 

La Primavera está ubicada en el municipio de Silvania en Cundinamarca, rodeada de los montes más hermosos y los valles más verdes